Cuando hace unos días empecé a escribir este artículo, estaba un poco sorprendido de la poca presencia del tema de la inmigración en la campaña electoral. Desde entonces hasta ahora se me ha dado la razón y han aparecido noticias y algún artículo en los medios sobre este asunto (como este editorial, o este artículo), que además son mucho más interesantes que lo que yo pueda contar.
No obstante, tengo algo que decir, ya que al Ministro Fernández Díaz tambien le preocupa el tema (podría ya de paso comentar estos temas con un poco más de suavidad y menos alarmismo, que hace mucho daño), dado que la inmigración llamada irregular proveniente de África está aumentando considerablemente , yo humildemente quiero prevenir al lector de la ola de xenofobia que podemos llegar a padecer en nuestro país.
Más allá de comportamientos individuales, de los que también hay que preocuparse, es bastante conocido el auge de partidos políticos xenófobos en muchos países de la Unión Europea. Nosotros, por algún motivo, todavía no tenemos “de eso” como se suele decir, o no de forma tan patente como en otros países. Tenemos partidos xenófobos, pero ninguno ha alcanzado las instituciones más altas, como las cortes generales. Pero más vale prevenir que curar, por si acaso.
La mayoría de cosas que voy a exponer a continuación las he extraído del informe llamado “El avance de la xenofobia en Europa” (Gámez Tejada, 2013), y todas juntas conforman un pequeño resumen de lo que sería una especie de “racismo 2.0” que es el que estila la ultraderecha europea, de la que también se puede decir que ya es una “ultraderecha 2.0” (el ejemplo típico es el Frente Nacional de Francia) por sus diferencias en la forma del discurso con la ultraderecha más tradicional.
En primer lugar es llamativo que en este informe se señala que el hecho de que algunos estudios emplazan a España en un buen lugar en cuanto a integración se refiere, gracias en parte a algunas medidas tomadas por el Gobierno Español en el año 2009 (un dato sorprendente, pues mucha gente, tanto españoles como no españoles, pensamos que España es un país racista en algunos aspectos) y que esto puede ser un factor más que esté evitando el auge de la xenofobia.
Otro aspecto a destacar es que no existe relación directa entre el número de inmigrantes y el auge de partidos xenófobos. Es decir, hay paises con altas tasas de inmigración (como Luxemburgo o España) sin partidos xenófobos importantes y países con bajas tasas e inmigración y con partidos xenófobos importantes (Polonia). Y aquí es donde os preguntareis porque estoy tan preocupado por el tema. Bueno, pues resulta que por ejemplo Italia (a donde últimamente llega un mayor número de personas sin papeles) tiene problemas de inmigración máyores que los nuestros (como puede leerse en este artículo) y resulta que no solo la Liga Norte, cuyos miembros entre otras cosas insultaban a una ministra por ser negra, sino que hasta Beppe Grillo se apuntó en su momento a la xenofobia 2.0 (os animo a una búsqueda Grillo+xenofobia en Google). Así que ya lo he dicho, hay que prevenirse. Por si acaso.
Otra característica es que estos partidos suelen ser además euroescépticos, enmascarando con una defensa de la diversidad la intención de discriminar.
Ahora bien, si el aumento de inmigración que esta ocurriendo o va a suceder en los meses o años sucesivos, viene acompañado de un aumento de xenofobia, ¿con que mensaje nos la van a vender?
Pues en resumidas cuentas, nos van a decir, con unas u otras palabras, que nuestras instituciones corruptas han permitido o estan permitiendo que los inmigrantes saturen el país, y que si hay que elegir, los españoles primero. Esto último es la clave del mensaje, es el tipo de xenofobia que se conoce como preferencialismo, y que se sirve de no ser racista de un modo abierto para enmascararse y ser aceptable socielmente. Todo esto vendrá acompañado de un lenguaje político rupturista, dirán que no son de izquierdas ni de derechas, y como ya he mencionado, que los partidos tradicionales son corruptos y hay que regenerar el sistema (mediante ellos mismos por supuesto). Esta es la retórica del Frente Nacional o de Plataforma per Catalunya, por ejemplo. Ah, y que quede claro que no todos los partidos “rupturistas” con el sistema son necesariamente xenófobos, faltaba más.
La otra pregunta clara que podemos hacernos sería: antes incluso de que aparezcan estos partidos, ¿qué debemos o qué podemos hacer?
Bueno, resulta que estas olas de xenofobia se han apoyado en la falta de oposición del resto de partidos y de la sociedad, algunos incluso han adoptado parte de su discurso (veáse el caso de Sarcozy o Valls en Francia). Lo que podemos hacer desde ya es no tolerar siquiera actitudes poco serias con este asunto, en nuestros políticos ni en nadie (como precisamente Arias Cañete hace unos años por ejemplo).
Bien solo un par de cosas más, relacionando este tema con las elecciones del 25 de mayo. En primer lugar, os recomiendo mirar los apartados sobre inmigración de los programas electorales de algunos partidos españoles, ya que he visto que son muy diferentes entre sí, a ver que os parece cada uno. No quiero comentar nada por que es evidente, dada mi preferencia por la izquierda, cuales me gustan más y cuales menos.
En segundo lugar, y más importante, creo que solo por el problema de la xenofobia, que aunque de momento no sea directamente español sí es europeo, y por tanto nos afecta, es muy importante ir a votar, para hacer frente a estas ideas en Europa, cuanto más fuerte y legítimo sea el resto del parlamento contra estas ideas, mejor.
Biografía:
Tejada Gámez, M., El avance de la xenofobia en Europa, Fundación IDEAS, 2013.
Ilustración:
El Roto
Antonio Rodriguez
Militante de JS de Chamberí