El pasado viernes celebramos en nuestra agrupación un debate en torno a la prostitución.Las encargadas en plantear las dos posturas fueron nuestras compañeras María y Amada. Un debate que dió para mucho y en el que todos los compañeros participamos activamente. María defendió sus posturas regulacionistas, recurriendo a argumentos razonados y estructurados en su primera exposición, y a ejemplos más reaistas durante el propio debate mientras que Amada empezó centrando su posicionamiento y encuadrándolo como un problema de género.
Amada basó su defensa a la Abolición en el principio de que siempre hay un abuso. Está claro que defiendia un modelo cercano al modelo Sueco, nada que ver con cómo se trata la abolición en cualquier sistema dictatorial.La postura de Amada fue apoyada por algún compañero que consideraron la prostitución como una forma de esclavitud en la que siempre hay dominación y denigra los derechos de los trabajadores. Por otro lado los posicionamientos de María se apoyaban en que precisamente una regularización aportaria garantias laborales y derechos de los que ahora carecen, además de que evitariá el esclavismo, las mafias, haría que el estado ingresase más para invertir en educacion y sanidad, y sobre todo dos temas de libertad moral claros:
1. Todo el mundo tiene derecho a la sexualidad.
2. Cada uno es libre de hacer con su cuerpo lo que quiera, siempre que no haya carácter de delito en su actuación o denigración.